miércoles, 26 de enero de 2011

Los derivados financieros

Para comenzar, vamos a dar una definición sobre lo que es un derivado financiero.
En los mercados de valores hay un tipo de activos o instrumentos financieros cuya principal peculiaridad es que su valor de cotización se basa en el precio de otro bien o activo. Cuando nos encontremos con un elemento que responda a estas características podremos decir que estamos ante un derivado financiero.


Podemos encontrarnos con diferentes tipos o clases de derivados financieros. Dependiendo del índice de valor del que se deriven vemos que existen :                                                                                                                            



  •       Derivados financieros de renta fija.
  •       Derivados financieros de renta variable.
  •       Derivados financieros tales como las acciones y los índices bursátiles.                                          
                y muchos más.




Los derivados financieros suelen estar regulados por diversos órganos encargados de regular el funcionamiento de estos así como gestionar sus actividades de compra-venta. En España, los derivados financieros están regulados por dos órganos: El MEEF Renta Variable en Madrid; y el MEEF Renta Fija en Barcelona. 






Generalmente,los derivados financieros son tan atractivos ya que nos permieten hacer una previsión más o menos certera del valor futuro de los activos sin llevar una contraprestación económica importante. Además podemos incluso comerciar con los derechos para así comprar o vender los activos, y no solo limitarnos  al uso normal de compra-venta de acciones,  logrando así un margen de beneficios mayor.Debido a esto, el carácter especulativo se hace cada vez mayor.










Las principales características de los derivados son:
  • Su precio varía en función del valor al que este ligado dicho derivado, denominado ´´activo subyacente``.
  • Pueden o no cotizar en bolsa, lo normal es que sí lo hagan.
  • Siempre se liquidan de forma futura.
  • La inversión a realizar es muy inferior comparada por ejemplo con la necesaria para la compra de una acción.
  • Pueden estar relacionados con activos no económicos, como por ejemplo con oro, maíz, arroz, trigo, aceite....


Además podemos utilizarlos para:
  1. Reducir perdidas: Los inversores diseñan sus carteras para conseguir beneficios en aquellos mercados que tiendan a la alza, aunque el precio no es fijo, puede subir y bajar. Para proteger las carteras, los gestores consideran al menos tener en cuanta una posición contraria a la de su cartera, así el inversor siempre tendrá en su cartera una cobertura qye le permita tener un elemento que le de beneficio durante las caidas inesperadas. 
  2. Incrementar los ingresos: La venta de opciones es una buena idea para obtener ingresos adicionales. 


En resumen, los derivados financieros son unos activos que basan su valor en el futuro de otro, asumiendo así un riesgo muy alto o moderado, en función de la contraprestación (acciones o futuros).



                                                                                                



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